En épocas complejas y difíciles, donde los clubes luchan por subsistir, Maristas integra la lista de las excepciones.
La institución de calle Rawson culminó un viejo anhelo, por el cual han trabajado intensamente, la iluminación de la cancha de hockey sobre césped “Carlos Chueco Saponara”. Por lo tanto, a partir de ahora, se podrán jugar partidos en horario nocturno sin ningún inconveniente.
El club agradeció a la empresa Erlyf Sa y a la gestión de las jugadoras por todo el trabajo realizado.
Momentos de mucha alegría y de felicidad plena, los que vive la familia verdiblanca.
