El protagonista de la historia es Marcos Campos, actual Coordinador de árbitros de la Asociación Futsal San Rafael.
Con 37 años de edad, lleva 11 temporadas en el arbitraje del futsal (tanto en la Confederación Argentina como en el futsal AFA).
Nacido en suelo sanrafaelino, dirigió fútbol hasta noviembre del año pasado. Su último partido fue Huracán-Pacífico de General Alvear por el Regional Amateur.
“Lo tomé como una despedida un poco por las obligaciones laborales y porque quería darle más tiempo al futsal que me gusta mucho así que aproveché para meterme de lleno”, comentó.
A la hora de elegir que es más difícil dirigir, fútbol o futsal, expresó: “El futsal ya que como decimos en la jerga es un bloque concentrado de riesgo. Hay mayor cantidad de exposición al roce, la pelota está mucho tiempo en la suela de los jugadores y eso lo hace difícil a la hora de arbitrar. Es muy entretenido pero exige un alto grado de concentración y estar siempre atento”.
A nivel selecciones, este año dirigió el Argentino B, impartiendo justicia en semifinales (que definen el ascenso) como así también en la gran final.
Mientras que, a nivel clubes esta temporada integró el plantel arbitral en la División de Honor. “Tuve la suerte de vivir esa experiencia y poder pitar 4tos de final y semifinales”.
Además participó en la Copa de Oro (tercer torneo en importancia a nivel nacional) donde dirigió una de las semifinales por el ascenso a la División de Honor.
“Me queda un gran objetivo, uno solo y es poder dirigir un Argentino A de selecciones. Pero al no contar con nuestra selección en esa divisional, no tenemos la posibilidad de dirigir un torneo de esas características”, aclaró.
El Argentino A de selecciones lo arbitran 14 jueces de las selecciones participantes y solo dos invitados.
“Con lo hecho años anteriores y este 2024, el año que viene creo que tengo posibilidades de poder estar” señaló y agregó “Agradezco a Pablo Faliti y a Fernando Álvarez por el apoyo constante y acompañar en todo momento”.
En cuanto a su función, la de coordinar a los árbitros, puntualizó: “Soy nuevo en esta función de coordinar por eso sigo aprendiendo, trabajando, escuchando y siempre con ganas de ayudar para que esto crezca”.
Por último agradeció a su familia, ese sostén tan importante.
“Ellos son muy importantes, la única hinchada que tiene un árbitro”, confesó.